Despertar.
Azul profundo.
Es mi última apnea.
Vibraciones:
En mis oídos el zumbido de mil y una abejas compungidas.
Suelto el aire,
como una ola que hace espuma a la orilla de mi imaginario salvaje.
La manta marca con sutileza mi anatomía perdida.
Sin abrir los ojos noto un ser extraño
que incursiona a modo de guerrilla
por la popa de mi nave de los sueños.
La yema de tus dedos corazón dibujan un rastro,
escarbando dentro de esos pelitos que siempre quise eliminar de mis piernas.
Vas dejando tesoros a tu paso:
Caricias tímidas.
Besos estrellados como los huevos que nunca desayuno.
Mordiscos atemporales que jamás esperaba,
pero que me emocionan con estruendo.
Tu nariz colapsa con mi seta sagrada.
Izas mi bandera… pero no suena el himno.
“Oh gloria inmarcesible,
oh jubilo inmortal… ”
Esa irónica estrofa de legado chibcha se reproduce en mi cabeza mientras tu pecho pone en todo lo alto al pabellón del país independiente de mi realidad disonante.
Stop motion
Te sientas sobre mí:
Actitud de rodeo yankee (pasando del sombrero).
Acto seguido: Me encañonas con tus ojos certeros
mientras lames frenéticamente
(y en cámara lenta) tus axilas.
NOTA AL PIE DE PÁGINA:
Nunca pensé que algo así me volviera tan loco.
Como me gustan tus labios.
Sin desearlo
y sin esperarlo…
Eres droga para mí.
Te penetras con mi miembro,
(hasta tan adentro)
que tus lágrimas resbalan
con ecos en el sonoro silencio.
Loop frenético donde las acciones enumeradas se repiten al derecho y al revés.
Y tú,
conduces la situación pelliscando mis pezones …. Como el delay electrónico de un maestro de ceremonias que guía a una horda de locos hacia un estallido en plural efervescente.
En este punto soy consciente de lo mucho que quiero conocerte.
¡I wish u were here!
Buenos días